El rover del Laboratorio de Ciencias en Marte de la NASA, más conocido como Curiosity. Crédito: NASA / JPL-Caltech / MSSS.
El rover del Laboratorio de Ciencias en Marte de la NASA, más conocido como Curiosity, ha encontrado recientemente una ubicación en el cráter Gale con la arcilla más abundante observada hasta ahora en la misión. Dos muestras de perforación recientes, llamadas Aberlady y Kilmarie, en honor a lugares en Escocia, forman parte de una unidad geológica denominada “unidad de soporte de arcilla” de la espectroscopia orbital. Aunque es interesante confirmar los datos espectroscópicos utilizando técnicas más detalladas en el terreno, la emoción de la detección de arcilla se debe a las pistas que proporciona sobre el pasado de Marte. Los minerales arcillosos se forman a partir del desgaste químico de las rocas en presencia de agua, por lo que un área con una gran cantidad de minerales arcillosos indica a los geólogos que esa área tuvo mucha agua durante un largo período de tiempo. La gran abundancia de arcilla en Aberlady y Kilmarie proporciona a los astrobiólogos pistas sobre un entorno potencialmente habitable en el pasado de Marte, y los detalles de la geología circundante informan a los científicos planetarios sobre cómo surgió este entorno y qué podría significar para nuestra comprensión de la historia geológica de marte.
El rover también ha estado mirando hacia el cielo y fotografiando formaciones de nubes. Crédito: NASA / JPL-Caltech / MSSS.
El rover también ha estado mirando hacia el cielo y fotografiando formaciones de nubes, que probablemente están hechas de hielo de agua y se cree que ocurren cerca de los 31 kilómetros de altitud. El módulo de aterrizaje InSight está ubicado a unos 600 kilómetros de Curiosity, y si se pueden obtener imágenes de las mismas nubes de ambos módulos, será posible determinar con mayor precisión la altitud de la nube.