Acotación en la edad de la estructura de impacto de Morokweng en Sudáfrica

Crédito: Figura 1 del artículo Kenny et al., 2021.

Crédito:  Figura 1 del artículo Kenny et al., 2021.

La formación de cráteres de impacto es un proceso geológico omnipresente en el sistema solar. Esto tiene importantes implicaciones para la habitabilidad planetaria debido al papel de los impactos en los eventos de extinción masiva en la Tierra. Los impactos también han tenido una influencia significativa en la evolución térmica de las cortezas planetarias. Para entender completamente el papel de los cráteres de impacto en los procesos del sistema solar, en particular sus efectos sobre la habitabilidad, es importante determinar las edades de los grandes eventos de impacto y las velocidades de enfriamiento de los derretimientos generados por el impacto.

Un estudio reciente, dirigido por Gavin Kenny del Museo Sueco de Historia Natural, informó sobre la edad de la estructura de impacto de Morokweng en Sudáfrica. Esta estructura de impacto tiene aproximadamente 80 kilómetros de diámetro y contiene rocas fundidas de impacto que se formaron y enfriaron inmediatamente después del impacto. Kenny y sus colegas recolectaron seis muestras de un pozo perforado en la estratigrafía de fusión de impacto. Usando el sistema de desintegración radioisotópica de uranio-plomo, y midiendo con precisión el contenido de uranio y plomo del mineral circón, el equipo determinó que el impacto ocurrió hace 146 millones de años. Esta edad es unos millones de años más antigua que un evento de extinción menor en el límite Jurásico-Cretácico (J-K), que se estima que ocurrió entre 140 y 145 millones de años. También construyeron un modelo térmico para determinar la velocidad de enfriamiento y solidificación de la masa fundida generada en el momento del impacto. Según sus modelos, se necesitaron entre 11.000 y 35.000 años para que toda la masa fundida generada en la estructura de impacto de Morokweng se enfriara y solidificara. Tasas de enfriamiento tan rápidas (en escalas de tiempo geológicas) implican que la edad de 146 millones de años data con precisión el evento del impacto. Los autores proponen que si el impacto de Morokweng jugó un papel en el evento de extinción de J-K, se podría encontrar evidencia de ello en rocas del Jurásico tardío (Tithonian). LEE MÁS