Posible Detección de una Exoluna alrededor de Kepler-1708 b

Crédito: NASA/ESA/L. Hustak.

Uno de los avances más emocionantes que ha acompañado a la detección de exoplanetas es el descubrimiento de exolunas, satélites naturales que orbitan estos lejanos planetas alienígenas. Aunque sabemos que las lunas son comunes en nuestro sistema solar, sabemos muy poco sobre su formación. Desafortunadamente, es difícil establecer la existencia de una luna que orbita alrededor de un exoplaneta utilizando el método más común para detectar el propio planeta. La mayoría de los exoplanetas se detectan mediante el análisis de curvas de luz, mediciones muy precisas del brillo de la luz emitida por una estrella en un rango de longitudes de onda, para determinar si hay una caída periódica y predecible en la curva de luz a lo largo del tiempo. Esta caída puede indicar que un objeto opaco, es decir, un exoplaneta, orbita regularmente frente a la estrella y bloquea una fracción de la luz estelar detectable mientras lo hace. Detectar una exoluna implica identificar y separar las caídas individuales del exoplaneta y la exoluna en la curva de luz detectada. Estas detecciones de exoplanetas y sus lunas se complican aún más por la variabilidad natural del brillo de la estrella, así como por las variaciones en la sensibilidad del telescopio a lo largo del tiempo.

Un estudio reciente realizado por David Kipping (Universidad de Columbia) y sus colegas analizó las curvas de luz recopiladas por el telescopio Kepler de 70 posibles exoplanetas que tienen una mayor probabilidad de orbitar satélites. Sin embargo, incluso al centrar su estudio en estos candidatos favorables, solo surgió una posible exoluna: Kepler-1708 b-i. La exoluna putativa Kepler-1708 b-i se une a una exoluna candidata previamente detectada, Kepler-1625 b-i, como los primeros posibles satélites naturales que orbitan planetas fuera de nuestro sistema solar. El futuro análisis con el telescopio espacial James Webb ayudará a confirmar o negar su existencia, lo que podría ayudar a los investigadores a comprender cómo evolucionan los sistemas planetarios y cómo afectan a la posibilidad de que un planeta albergue vida. LEER MÁS