La primera detección en la Tierra de un campo de cráter secundario en Wyoming

Un cráter de impacto secundario de 60 metros de diámetro descubierto en el sureste de Wyoming. Crédito: Kent Sundell/Colegio Casper.

Se han descubierto más de 30 pequeñas estructuras de impacto de meteoritos en Wyoming, de temaños desde 10 a 70 metros de diámetro. Estas pequeñas estructuras contienen granos de cuarzo impactados, que solo se forman como resultado de un impacto, pero han desconcertado a los científicos porque no contienen fragmentos de roca extraña que indiquen una fuente extraterrestre. Sin embargo, una pista sobre su origen es que varios de estos cráteres son elípticos, con los ejes de las elipses apuntando a una ubicación común en la frontera de Wyoming y Nebraska.

Los impactos de meteoritos típicamente forman cráteres circulares, independientemente de su ángulo de impacto, debido a la velocidad a la que impactan contra la Tierra. Sin embargo, en otros cuerpos planetarios se ven pequeños cráteres elípticos que irradian desde un punto común. El punto común de estos campos de cráteres usualmente es un gran cráter de impacto. Se cree que, en estos casos, los impactos que formaron los grandes cráteres fueron tan grandes que expulsaron rocas del lecho rocoso a cientos de kilómetros del sitio del impacto principal, generando un “campo de cráteres de impacto secundario”.

Un estudio del campo de cráteres de impacto en Wyoming, dirigido por Thomas Kenkmann de la Universidad Albert Ludwig de Freiburg, Alemania, utilizó la disposición radial de los cráteres para reconstruir sus trayectorias de impacto. Los cálculos de los investigadores mostraron que el impactador principal probablemente golpeó la Tierra hace aproximadamente 280 millones de años cuando existía el supercontinente Pangea, formando un cráter de 60 kilómetros de ancho que desde entonces ha sido enterrado por arena y limo. Esto haría que el sitio de impacto principal sea uno de los más grandes de América del Norte. Se planean investigaciones futuras para buscar evidencia adicional del cráter de impacto primario. Esta es la primera identificación de un campo de cráteres secundarios en la Tierra, un hallazgo emocionante para la comunidad científica planetaria. LEER MÁS